La escalada en el precio de los carburantes amenaza la actividad de numerosos sectores productivos, señaladamente de los que utilizan derivados del petróleo o gas, como el sector de las autoescuelas.
Así lo explica el presidente de la Confederación Nacional de Autoescuelas (CNAE), Enrique Lorca: "Si la crisis no se soluciona pronto, nos veremos obligados a repercutir este insostenible incremento en el precio de los permisos, con el consiguiente impacto en la inflación y en la demanda del propio carné de conducir. Peligra la continuidad de muchas autoescuelas y negocios que requieren de conductores profesionales".
Apunta además que, para evitar el colapso y mientras dure la crisis, el Gobierno debe aplicar medidas que palíen este duro golpe. En concreto, la Confederación propone que se fije por Real Decreto el precio de los combustibles o se baje el IVA (u otros impuestos), como hizo meses atrás cuando la factura eléctrica se disparó. Situaciones excepcionales requieren soluciones excepcionales.
"Lo que está sucediendo nos demuestra la necesidad de actualizar la Directiva Europea, la cual regula aquellos sectores estratégicos que tienen acceso al gasóleo con fines profesionales, al objeto de añadir a las autoescuelas", concluye Enrique Lorca, quien ostenta ltambién a presidencia de la Federación Europea de Autoescuelas (EFA).