Todos sabemos que, desde hace años, usar el móvil y conducir está totalmente prohibido, por el peligro que conlleva. Pero desde que irrumpió en nuestras vidas la aplicación “Whatsapp”, muchos conductores han cogido la costumbre de contestar al móvil mediante esta aplicación.
Esta conducta, aparte de infringir las normas, genera un importante riesgo con la consiguiente probabilidad de sufrir un accidente.
Hacer uso de esta aplicación:
- Incrementa el riesgo de colisionar contra otros vehículos.
- Puede producir un mayor número de salidas del carril.
- Se recorre una mayor distancia invadiendo el sentido contrario (peor control lateral del vehículo).
- Se comenten más infracciones.
- Se muestran conductas más arriesgadas.
Una de las prioridades de la Dirección General de Tráfico (DGT) es poner fin al uso del móvil al volante. Para ello, se plantea que esta práctica suponga la pérdida de 6 puntos del carné de conducir (ahora son 3 puntos) y una sanción de 500 euros, frente a los 200 actuales.
De esta forma, esta infracción equivaldría a conducir bajo los efectos del alcohol o las drogas, conducir de forma temeraria, superar en más de la mitad el límite máximo de velocidad o llevar inhibidores de radar.
