El color es el mayor aliado de la decoración, pero también un arma de doble filo si no lo combinamos bien. Escogiendo una serie de colores que combinen a la perfección, sumado a una decoración acertada, conseguiremos darle un cambio de look integral a cualquier espacio. Pero si en cambio nos decidimos por colores demasiado arriesgados, se debe tener cuidado, ya que simplemente un color que desentone terminará estropeando la armonía. En el siguiente artículo vamos a repasar algunos consejos sobre decoración y pintura para poder conseguir crear hogares únicos.
La pintura es la base para empezar cualquier cambio significativo
Aunque antes de comenzar a cambiar el color de paredes y techos ya tendremos que saber cómo van a ser los muebles, por lo menos a nivel de inspiración, es cierto que el color de estas superficies serán el telón de fondo de nuestra gran obra de decoración. Podemos encontrar pintores en Madrid economicos que nos ofrecerán presupuestos a medida sin dejar de ofrecer un asesoramiento sobre los materiales o tipos de pintura más recomendables.
Pero ¿cómo comenzamos a combinar los colores con la certeza de que no nos vamos a equivocar con la mezcla? Pues gracias al estudio del color, existen dos reglas fundamentales a la hora de combinar los colores y su proporción, la “teoría de la rueda de color” y la regla del 60/30/10.
La rueda del color
La rueda de color es uno de los mayores aliados a la hora de pensar en la decoración de nuestra casa, desde la base sólida que trabajarán los pintores hasta el resto de elementos de decoración, como los muebles y los objetos que se hallarán en esos espacios. Dentro de lo que es esta rueda de colores, se dan tres maneras para poder combinar todas las tonalidades cromáticas:
- Combinación monocolor: parece la opción menos arriesgada, pero no por ello es la más fácil. Aquí, escogemos un color y lo combinamos con sus semejantes correspondientes de la fila de la rueda. Lo que combinamos realmente es la intensidad del tono.
- Combinación consecutiva: en este caso, lo que se combina son los colores que se suceden en el círculo de colores. Se puede optar por una opción con tres colores cálidos, o por el contrario, tres fríos. Si pedimos ayuda a pintores profesionales Madrid, éstos pueden aconsejarnos para saber cuál es la degradación de colores armónica más acertada. Si es más conveniente que todas las paredes vayan con el mismo color, combinarlas también es posible o jugar para que cada espacio tenga su base de pintura diferente.
- Combinación complementaria: es sin duda, una de las más complicadas, y es un caso totalmente opuesto al anterior. En lugar de sucederse, se trata de que combinemos los colores opuestos en el lado contrario de la rueda, una combinación de contrastes que combina entre sí. Podemos elegir un color de base y dos colores enfrentados al mismo, aunque lo cierto es que en este tipo de combinación, igualmente es más recomendable intentar utilizar solamente dos colores.
La regla del 60/30/10
Ahora que ya sabemos cuáles son las técnicas de combinación de colores, nos surge la evidente pregunta: ¿cuánto color se debe usar de cada uno? ¿Deben estar los seleccionados compensados de la misma forma? Las dos respuestas se encuentran en el nombre de la propia ley: 60/30/20.
La idea es elegir uno de entre los colores que hayamos seleccionado y darle un protagonismo dominante, de manera que se pueda pintar así un 60% del espacio. Una vez hecho, escogeremos el secundario, con un 30% de proporción del espacio, y finalmente un 10% con el tercero. El primero suele ocupar la mayoría de las paredes y los objetos voluminosos de la casa, como suelen ser las mesas, sillas o los sofás. El segundo puede jugar con algunos recipientes, al colocar macetas, flores y pequeñas lámparas que permitan calmar ese 60% del color principal. El tercero, con los detalles más anecdóticos, como pueden ser los almohadones, la cubertería y las mantas de invierno o las telas suaves de verano.
