El C.F. Fuenlabrada llegaba a esta jornada 12 con la necesidad mental de cortar con el maleficio fuera de casa antes de que la situación se agrave. Un punto de quince, trece goles encajados, dos marcados...y una eliminación en Copa del Rey ante el Coria, equipo de 2ª RFEF que les metió dos goles en su campo. Caer ante el Pontevedra, además de suponer la tercera derrota consecutiva (sumando Copa) podía dejarles más cerca del descenso que del playoff. Muy lejos de donde quieren estar, entre los mejores.
El once del Fuenlabrada ya parecía una declaración de intenciones. A la defensa de cuatro se sumaban dos centrocampistas defensivos y de corte, y dos extremos como Cubero y Barbosa que se desempeñan también como laterales. Cuando tocaba defender, Iribas y Bolaño se metían con los centrales y Cubero y Barbosa ocupaban el carril. Un muro que terminó funcionando, en un partido que resultó ser muy serio y solvente para los de Mere Hermoso. De hecho, brillaron más sin el balón que con él.
Cuestiones tácticas aparte, la novedad también estuvo en lo que pareció ser una consigna importante: nada de regalar posesiones cerca del área. Si hay que echarla fuera, se echa. Si hay que pegar un pelotazo al campo contrario e intentar armar así el juego ofensivo, se hace. Pero perder la pelota por intentar jugarla desde atrás estaba prohibido. La experiencia, aunque no siempre, termina enseñando. Fallar por intentar salir combinando no iba a suceder en este partido.
Y le salió bien la apuesta a Mere y su equipo. Pudo llevarse el partido, incluso, con ocasiones realmente claras como el balón al palo de Fer Ruiz (jugadón individual de puro esfuerzo y corazón) o el centro-chut de Barbosa que se estrelló en el larguero (o en las manoplas de Cacharrón). Por momentos, el Fuenla llegó a tener la voz cantante en la faceta ofensiva sin sufrir en la defensiva, pero no pudo marcar.
Igual pasó con el Pontevedra, que tuvo su primera gran ocasión gracias a un fallo grave de interpretación arbitral, que creyó que debía dejar seguir tras una falta que vio completamente al revés. Por suerte, Dani Hernández lució un paradón de balonmano al disparo ed Abelenda. Minutos después, Charles falló un remate clarísimo en la frontal del área chica, en el probablemente único duelo que perdió Juanma Marrero en todo el partido.
Con este empate a cero final, el Fuenlabrada rompe con la racha de derrotas y vuelve a puntuar fuera de casa. No es el mejor resultado, pero es un comienzo. Quizá un camino a seguir, el de echar el cerrojo atrás y tener ocasiones como para decantar el partido de tu lado. Desde luego, dejar la portería a cero y rendir igual o mejor del minuto cero al noventa es de por sí una mejora importante. A partir de ahí, pueden llegar todas las demás. Paso a paso, un comienzo que ojalá tenga continuidad.
ONCE DEL PONTEVEDRA C.F.: Cacharrón; Seoane, soto, Churre, Bastos; Miguel Román, Alberto Rubio (Yeiko), Borja Domínguez, Martín Diz (Álex González, Abelenda; Rufo (Charles)
ONCE DEL C.F. FUENLABRADA: Dani Hernández, Iribas, Coch (Sotillos), Juanma, Bolaño; Diamé. Javi Robles (Cristóbal), Cubero, Barbosa (Iban Salvador); Diego García (Amigo), Fer Ruiz (Alegría)
GOLES:
ÁRBITRO: Manuel Pozueta Rodríguez
