No es broma, la estrella estadounidense se ha dejado convencer para interpretar dos canciones, una de ellas de su último disco, durante la próxima edición del festival de Eurovisión que tendrá lugar en Tel Aviv en el mes de mayo.
Se espera que llegue rodeada de su círculo más próximo, formado por 160 personas.
Madonna es conocida seguidora de la Cábala, una interpretación mística del Antiguo Testamento de la tradición judía.
El millón de dólares saldrá del bolsillo del multimillonario canadiense-israelí Sylvan Adams. El evento será retransmitido por la televisión pública.
El certamen se celebrará en Israel tras la victoria el año pasado de Netta Barzilai y su cacareada canción contra el acoso "Toy".
Además de las agrupaciones habituales creadas para pedir el boicot cultural a Israel, unas cincuenta personalidades británicas, entre ellas Peter Gabriel o Ken Loach lo hicieron hace unos meses para perjudicar el concurso musical y denunciar con ello el trato de Israel a los palestinos.
