La operación 'Sawara' se inició a principios de este año, cuando los investigadores tuvieron conocimiento de que un grupo de personas podría estar dedicándose al robo de vehículos en la Comunidad de Madrid para posteriormente despiezarlos y exportarlos a África.
Los agentes intervinieron material que utilizaban para borrar los números de bastidor y herramientas para el despiece y para la clonación de llaves y maquillado de bastidores, además de inhibidores de frecuencia y documentación de vehículos en blanco. Además se han recuperado 18 motocicletas y un turismo que habían sido sustraídos. Se estima que la organización habría obtenido por el robo de los vehículos un beneficio de cerca de 500.000 euros.
Los presuntos componentes de la organización criminal se encargaban de localizar las motocicletas que necesitaban, de acuerdo con la demanda, sin importar marca y modelo. Posteriormente, las introducían en un almacén o una nave donde procedían a su desmontaje en piezas. Una vez tenían suficientes motocicletas, los trasladaban a una nave ubicada en la zona del sur de Madrid, donde los introducían en contenedores, tapando la parte delantera con piezas que adquirían en desguaces para dar apariencia de legalidad. A continuación montaban el contenedor en el semirremolque de un camión y lo trasladaban a un puerto marítimo, normalmente Valencia, donde era trasladado por barco al continente africano.
Por todo ello, el pasado 15 de mayo los agentes procedieron a la entrada y registro en dos domicilios en Pinto y Fuenlabrada y en otros tres inmuebles, en localidades de Madrid y Toledo destinados al almacenamiento de las motocicletas sustraídas y a la detención de los implicados.
A los detenidos se les imputan los supuestos delitos de sustracción de vehículos a motor, falsedad documental, receptación, usurpación de estado civil, contrabando y pertenencia a grupo criminal.