Fin del descanso para el C.F. Fuenlabrada. Tres diez días de preparación y calma, el equipo de Carlos Martínez tenía una muy buena oportunidad para cerrar de un plumazo la mala racha y ganarle a un Real Unión que solo ha vencido una vez fuera del Stadium Gal. Un equipo que, además, marca y le marcan mucho.
Una gran oportunidad para los azulones, que aprovecharon y no. Si miramos los primeros quince minutos, el Fuenla sí tenía muy claro lo que tenía que hacer y cómo para dañar al conjunto irundarra. También daban facilidades (por algo encajan tanto), pero las ideas estaban claras. Mucha presión, todos al campo contrario y balones a Fer Ruiz y Sergio Benito. Fue bien, hubo dos ocasiones claras (Ale Galindo la mandó al larguero) y cero peligro en contra.
Después de esos quince minutos, el Fuenlabrada fue progresivamente decayendo. Primero, empezando a fallar controles y pases fáciles en campo rival. Luego, reduciendo su presencia en esa zona. Y, para acabar, entregando la pelota a un rival que, de la nada, empezó a encontrarse cómodo y a tener ocasiones en dos lanzamientos de córner y en un cabezazo de Solís que sacó a bocajarro Belman. Los fuenlabreños necesitaban poco para re enchufarse, pero no terminaron de hacerlo.
La segunda mitad no iba a cambiar el panorama. Arrancó con una gran sorpresa, de hecho: Sotillos fue sustituido por Cristóbal, y su sitio lo ocupó Buer. Sotillos estaba afectado por una semana de gripe, y Carlos Martínez todavía no ve al 100% a Vigaray, así que optó por Stephen para ir al lateral. No salió mal, pese a que el rival buscó mucho hacer daño por esa banda, pero el equipo se debilitó más en un centro del campo que no brillaba de por sí.
Otro cambio arregló un poco el panorama: salió Carlos Benítez en sustitución de Barbosa. El mediapunta fue el que tuvo la claridad, las ganas y la paciencia de tener la pelota y distribuirla. También de mirar hacia la portería. Entre él y Raúl Hernández, los más entonados, reactivaron al Fuenla para tener un final de partido más acorde a lo que se esperaba y a lo que había mostrado en un principio.
No fue suficiente, aun así, y sumó el cuarto empate en seis partidos (con otro día sin ver puerta). La mala racha se extiende, y el equipo alterna escasos ratos de buen juego con otros en los que las dudas y la apatía se imponían y ponían en riesgo sacar incluso un punto. Por sí solo, no es un buen punto. Quizá la jornada lo hace bueno...otra vez.
ONCE DEL C.F. FUENLABRADA: Belman; Sotillos (Cristóbal), Alba, Lama, Barbosa (Carlos Benítez); Buer, Ale Galindo; Fer Ruiz, Raúl Hernández, Sergio Benito (Durán); Ilies (Diego Gómez)
ONCE DEL REAL UNIÓN DE IRÚN: Agirre; Víctor Eimil (Imanol Baz), Iván Pérez, Montoro, José Carlos; Quique Rivero, Ander Vidorreta (Beobide), Íñigo Muñoz (Córdoba), Alain Oyarzun (Peru Ruiz); Alberto Solís (Asier Benito), Antón Escobar
ÁRBITRO: Francisco Fernández Vidal
GOLES:
