El C.F. Fuenlabrada vuelve a jugar fuera de casa. Y vuelve a jugársela. Visita este domingo A Malata, el campo del Racing de Ferrol, tras seis jornadas sin ganar (ni dejar demasiadas esperanzas con su juego). Siete puntos de los últimos treinta y seis. Una travesía muy complicada que deja muy pocas alegrías que llevarse a la boca. Una de ellas llegó la jornada pasada, es histórica y tiene que ver con Mere Hermoso: contra los gallegos alcanzará su partido número 101 dirigiendo al Fuenla.
Desde julio de 2018 hasta marzo del 2020, y desde este verano hasta hoy. El técnico gaditano ha dirigido 100 partidos del conjunto azulón, con sus históricos altos (el ascenso a Segunda de la 18-19) y dos bajos importantes: el que llevó a su cese en la primera campaña en la categoría de plata, tras once partidos sin ganar y una plaga de bajas; y el actual, donde el equipo está en descenso y lleva una victoria en doce partidos. Todo, lo bueno y lo malo, se junta para alcanzar un hito complicadísimo: llegar a los 100 partidos como entrenador de un equipo.
Ese es, quizá, el único punto positivo para un duelo en el que el Fuenlabrada sigue jugándose la vida una semana más. Tras caer derrotado en Ceuta, la jornada le dejó como estaba, a dos puntos de salir de la zona de peligro. Una suerte que quizá no tenga (o sí) esta jornada, en la que jugará sabiendo lo que hayan hecho Algeciras y Rayo Majadahonda. No podrá contar con Cristóbal (ya por última vez) ni con Coch, ambos sancionados. Se esperan pocas novedades en el once con respecto al que jugó en Ceuta.
Para el Racing de Ferrol, la situación es mucho más agradable pese a que también tiene sus necesidades. Distintas, pero no dejan de ser necesidades. Los de Cristóbal Parralo están sextos, a las puertas del playoff. Una zona en la que estaban cómodamente hasta que han encadenado una racha de una victoria en siete partidos, siendo los tres últimos empates. Datos que le han bajado de una zona noble a la que quiere volver rápidamente.
