El C.F. Fuenlabrada tenía este domingo un partido de lo más importante, y eso que sólo hemos alcanzado la jornada diez. Tras perder de la peor manera ante el Rayo Majadahonda, el duelo contra el Racing de Ferrol en casa se antojaba vital. En juego, no descolgarse demasiado del tren de playoff (a siete puntos de ganar el Alcorcón, a cinco en mejor caso, a dos si ganaban), no acercarse más al descenso, y quizá también la continuidad de Mere Hermoso al frente del banquillo azulón.
Y sobre el césped se notó que había ganas de redimirse del mal partido de la jornada pasada. La primera evidencia es que el equipo presionaba alto, con los cuatro de arriba presionando a toda la línea defensiva y los cuatro de abajo achicando hacia el centro del campo. No era un juego bello, pero era una estrategia efectiva. Los acercamientos fueron para el Fuenla, la única ocasión entre palos también.
Y además terminó en gol. Iban Salvador, que otros días está muy activo en buscar faltas para su equipo, esta vez estuvo muy atento a cubrir su lateral y ayudar a Bolaño. Además, dio su entrega habitual en ataque, lo que se tradujo en un lanzamiento desde la frontal que se coló entre palos tras desviarlo un defensa.
Pasaron los minutos, y el partido que era igualado se fue inclinando a favor del Racing de Ferrol a base de posesión. Los gallegos eran un equipo que no tenía prisa en salir de su campo. Nada de riesgos, calma hasta encontrar el pase adecuado hacia adelante. Con el cansancio del Fuenlabrada, eso y el buen trabajo que llevan encima hizo que dominaran con balón. Pese a eso, los de Mere no sufrieron como tal antes del descanso. Seguía habiendo problemillas atrás, pero no se convertían en problemones. Hubo soluciones a los fallos, en forma de ayudas.
La segunda mitad fue, en muchos momentos, una extensión de lo que había quedado en pausa con el descanso. Tuvo la primera ocasión el Racing de Ferrol, pero atajó Dani Hernández. Tuvieron también un lanzamiento al palo, y un rechace parado por Sotillos de forma heroica. También un gol anulado, bien anulado a Carlos Vicente por fuera de juego. El dominio visitante era aplastante, la resistencia heroica y sanadora para un equipo que necesitaba saber defenderse.
Y con los cambios, el Fuenlabrada mejoró. No lo suficiente como para evitar cierta sensación de peligro, pero sí para igualar un poco las fuerzas a través de una defensa de cinco que, sumada a más centrocampistas, cerró las puertas hacia el área azulona. El partido, de hecho, terminó más cerca del área gallego que del madrileño.
Victoria vital, sanadora y de mucho mérito. Vital porque evita que el Fuenla se vea más cerca del descenso que del playoff. Sanadora porque se logra dejando la portería a cero, y exigiendo un esfuerzo defensivo que se consiguió con esfuerzo de todos. Y de mucho mérito porque tenía enfrente a un rival que no sabía lo que era perder, y sólo había concedido cinco goles. Ahora lo sabe y ha concedido seis. El Fuenla respira.
ONCE DEL C.F. FUENLABRADA: Dani Hernández; Cubero, Sotillos, Juanma, Bolaño (Iribas); Enzo (Javi Robles), Diamé, Fer Ruiz, Iban Salvador(Aguirre); Diego (Cristóbal), Alegría (Barbosa)
ONCE DEL RACING DE FERROL: Gazzaniga; Enol Coto (Joselu), Jon García, David Castro (Padilla), Brais Martínez (Pascual); Jesús Bernal, Manzanara; Álex López, Carlos Vicente, Héber; Manu Justo
GOLES: 1-0 Iban Salvador, min.22
ÁRBITRO: Juan Antonio Manrique Antequera