La Comunidad de Madrid contará con una planta piloto para la fabricación de silicio, un elemento clave para la próxima generación de baterías de litio que impulsarán los vehículos eléctricos. La empresa Floatech, creada a partir de una investigación liderada por el Instituto Madrileño de Estudios Avanzados (IMDEA) Materiales, de la Consejería de Educación, Ciencia y Universidades, va a construir esta factoría en Getafe tras haber obtenido más de un millón de euros de inversión.
Esta startup madrileña tiene la ventaja de que no utiliza procesos de mezclado, disolventes o polímeros para la obtención de ánodos de silicio nanoestructurados, reduciendo así los costes y las emisiones de dióxido de carbono generadas.
Además, el método combina escalabilidad, sostenibilidad y da lugar a baterías con altas prestaciones. Igualmente, cuentan con un método para hacer nanosilicio en un formato textil que permite su introducción directamente en la línea de fabricación.
Actualmente, la compañía tiene un programa conjunto de desarrollo de celdas para automoción con un fabricante europeo especializado en este ámbito. Su objetivo es comenzar un proyecto similar para aeromovilidad y para dispositivos electrónicos portátiles. La nueva financiación permitirá su integración en la cadena de producción europea de baterías.
Con las nuevas instalaciones de Getafe, Floatech podrá suministrar productos a clientes industriales del sector transporte y electrónica. De hecho, ya ha logrado ventas en Europa y EE. UU. con el fin de iniciar en Asia a mediados del próximo año.