Sr. Director:
En primer lugar quería decirle que soy padre de un niño de cuatro años (bendita edad, ji ji), en esta ocasión me dirijo a usted para hablar sobre el abandono de los columpios de mi barrio, columpios viejos en mal estado etc.
Vivo en avenida de las naciones si, la calle con tantos colegios, que irónico verdad una calle con tantos colegios y unos parques que dan pena, así van las cosas.
Bueno al meollo del asunto, después de decidir mi mujer y yo que los columpios de nuestro barrio no están en condiciones nos pusimos a ver qué columpios están más cerca para poder llevar a nuestro hijo al parque un rato, según los pedagogos que son esas personas que entienden, un niño necesita una hora como mínimo para que no se sienta en casa como en una prisión.
Bueno decidimos llevarlo a los parques de otras calles, por cierto que tampoco están mejor y yo pienso jolín porque tengo que irme a otros parques si tengo en mi barrio columpios, no es justo, por eso mi queja.
Vivo en el barrio en el que los perros han tomado, sí tomado literalmente (bueno los incívicos de sus dueños mejor decir) las zonas de columpios, zonas de juego de niños para sus quehaceres (lástima no les pusieran una multa a sus dueños por no recoger los excrementos).
Porque esto muy sencillo, hay arena, si arena ese cultivo de gérmenes mezcla entre pis de perro, algún que otro humano que haberlos hay y miles de excrementos de perro.
De modo que tengo que ir a otros parques porque este querido ayuntamiento no es capaz de poner unas simples plaquetas de caucho reciclado, si sí, y encima reciclamos neumáticos (vuelvo a insistir que irónico), y cambiar el aspecto de nuestros columpios y así mi hijo y también el de otros padres puedan jugar en su propia calle.
¿De qué me quejo? de nada, de que me gustaría poder bajar a mi calle con mi hijo hoy, no dentro de veinte años que ya no pueda jugar con el porqué ya ha perdido una cosa que todos tuvimos alguna vez y ya se nos ha olvidado, la infancia, sí la inocencia, te suena verdad, a mi también y me deprimo al pensar que mi mujer cuando vuelve con mi hijo después del cole tiene que coger dos calles más para arriba a buscar otros columpios porque en los nuestros no se puede estar o no están bastante acondicionados para niños de cuatro años.
Y vuelvo a repetir la zona con mas colegios de toda Fuenlabrada, el barrio más próximo al ayuntamiento y vuelvo a insistir es irónico verdad.
GRACIAS Y UN SALUDO, un vecino de Fuenlabrada que un día también fue niño.