La investigación comenzó el pasado mes de octubre, al detectarse por parte de los agentes de la Guardia Civil un incremento de denuncias por robos en el interior de vehículos estacionados en la vía pública de Majadahonda.
Los agentes consiguieron deducir que la autoría de los robos era cometida por la misma persona. En todos los casos estaba fracturada la ventanilla trasera del vehículo, sustrayendo los efectos que había en su interior.
Fruto del dispositivo, se logró detener al presunto autor, a quien se le atribuye una treintena de hechos delictivos, no solo robos con fuerza, también hurtos y estafa, ya que ha utilizó las tarjetas bancarias para realizar pagos en diversos establecimientos.