Al fallecido se le perdió la pista el pasado 30 de abril cuando se marchó de su casa, situada en el barrio de Simancas y comentó a su esposa que iba a ir a recoger junto a dos personas su coche al depósito de Vicálvaro, después de habérselo requisado la Policía.
Rafael nunca volvió a casa, dejando su vehículo, un Ford Focus, con las puertas abiertas y con todas sus cosas, incluido el móvil, en un punto del municipio de Humanes. La madre del desaparecido presentó una denuncia el 3 de mayo en la comisaría de la Policía Nacional en Fuenlabrada.
Por otro lado, una persona encapuchada robó un camión en una gasolinera. En la madrugada del 1 de mayo ese vehículo ardió casi en tu totalidad en el mismo municipio, pero lejos del coche de Rafael. En su interior, hallaron un cuerpo totalmente calcinado, por lo que los agentes especializados comenzaron un trabajo para identificar a esta persona.
Tras un exhaustivo trabajo, hace unos días confirmaron que el cadáver hallado en el camión incendiado es el de Rafael. La Guardia Civil descarta en principio que se trate de una muerte violenta y creen que fue accidental. La familia tiene sospechas de criminalidad, por lo que pide que se investigue al detalle lo ocurrido.