Por fin, Luca ha sido expulsado de MasterChef. Luca se ha ganado salir del reality de TVE a pulso. Ha intentado preparar un plato en el que el ingrediente principal era la sepia y el desastre ha sido mayúsculo.
La tinta sin cocinar, la presentación lamentable, la teja quemada, la sepia medio cruda, la cebolla caramelizada con pinta de estar por allí como por casualidad... Un auténtico desaguisado.
Era lo esperado y, una vez que no ha podido ser favorecido por el jurado, ha terminado fuera del programa de forma justa. Hay que señalar que ante un desastre culinario descomunal, los miembros del jurado lo tomaron con humor y con un ataque de risa y esas cosas que cualquier otro no recibiría ni de lejos.
No son pocos los seguidores del programa que llevaban ya varias semanas demandando que el influencer dejase el programa, primero por las acusaciones de que estaba recibiendo un trato de favor de parte de la producción e incluso del mismo jurado, porque su padre es el dueño de uno de los proveedores del supermercado El Corte Inglés, quien suministra toda la comida al programa; y más recientemente, por las acusaciones de robo en una prueba que le pusieron en el punto de mira de otros muchos televidentes que estaban deseando que se fuese del programa.
Fuera como fuese, finalmente Luca ha sido expulsado y esta vez de una situación de la que no se ha podido librar. Al final, MasterChef ha demostrado ser un programa donde se premia la buena cocina antes que el saber estar.
