Los insectos son de los animales que más fastidiosos podemos considerar, si bien cumplen una función en específico, pueden tornarse realmente molestos si convivimos con ellos muy a diario. Y más, si estos insectos cuentan con alas, por ejemplo: cucarachas, moscas, abejas, mariposas, etc.
Solo por mencionar algunos, puesto que son una gran variedad los insectos que vuelan, y tal es nuestro desagrado que hacemos de todo por ahuyentarlos de nuestro hogar usando remedios caseros como inciensos, repelentes, hojas de laurel, insecticidas, incluso focos de luz especial para eliminar insectos voladores.
A estos normalmente los encontramos merodeando en un foco, ya sea en la lámpara de la calle, en el foco de nuestra cochera, incluso dentro de nuestra casa.
Y seguramente has escuchado a alguien decir “apaga el foco para que se vayan los insectos” y como por arte de magia se van, y no, no es que sigan ahí y dejes de verlos porque está oscuro, sino que estos insectos se van a rondar el foco más próximo que encuentren.
Tal es el caso de las mariposas que, de acuerdo al Diario ABC Ciencia, estos insectos cuentan con sensores de luz, que responden a luces con tonalidad tenue, por lo cual, si ven un foco próximo estas, irán a el cómo si se tratase de una abeja yendo a la miel, puesto que este lo usan para poder ubicarse en un lugar.
Por otra parte, los insectos voladores, que de igual manera utilizan cualquier punto de luz fija para poder guiarse, aunque no todos tienen la misma fijación por ese tono de luz, inclinándose más por la luz más fría como la blanca, o incluso la luz ultravioleta, tal es el caso de las moscas o las abejas, las cuales son más sensibles a esta.
Aunque estos insectos pueden convertirse en un verdadero dolor de cabeza si los vemos de manera continua en nuestro hogar, también es cierto que con este tipo de luces sufren mucho, pues el hecho de que sean un estímulo para sus ojos no quiere decir que sea bueno, puesto que algunos no saben como salir de esta luz y terminan golpeándose repetidamente incluso con el mismo foco, hasta caer. Algunos otros tal vez puedan salir, pero al quedar tan encandilados son presas fáciles para otros depredadores más grandes que ellos.
Ahora que sabes la razón, lo recomendable es no usar tanto estos tipos de focos que son para exterminar insectos, puesto que resultan en un final muy desagradable para ellos, lo mejor que podríamos hacer es usar algún remedio casero, como el vinagre que los ahuyenta por su olor, o también algunas hiervas que son fuertes para ellos, las cuales terminarán solo ahuyentándolos.