Se trata de un espectáculo donde varios componentes de la casa regional, acompañados de guitarra y percusión, interpretan villancicos populares.
La tradición viene de la celebración de la Navidad en Andalucía, donde la gente se reunía en las puertas de sus casas para cantar villancicos.
Una actividad que tiene su origen en Jerez de la Frontera y se remonta al siglo XVIII, donde en los patios de vecinos se compartía comida, bebida y villancicos aflamencados, al son de la zambomba.