El arrestado accedía al interior embozado con una sudadera y con mascarilla quirúrgica amenazando con un cuchillo de grandes dimensiones. Los tres hechos ocurrieron en el mes de abril aprovechando la apertura de estos
establecimientos de primera necesidad durante el estado de alarma.
La investigación se inició el pasado dos de abril cuando se cometió el primer asalto a una farmacia en la localidad, los agentes pudieron comprobar que el autor había cometido el atraco amenazando a los empleados con un cuchillo de grandes dimensiones y ocultando su rostro con una capucha y una mascarilla quirúrgica.
Las pruebas recogidas tras otros dos robos que se produjeron durante los días 18 y 27 del pasado mes, permitieron a los agentes confirmar que los tres atracos se habían cometido presuntamente por el mismo individuo, el cual actuaba siguiendo un patrón común, sustrayendo el dinero de la caja registradora, el de
los clientes que se encontraran en el establecimiento y huyendo después en bicicleta. La proximidad entre los comercios afectados hizo sospechar que el presunto autor podría ser residente de la zona, por lo que por parte de los agentes se estableció un dispositivo para su localización y detención que finalmente se produjo el pasado día 28 de abril.
Durante las pesquisas practicadas en la investigación, los agentes pudieron averiguar que podría estar maltratando a su pareja sentimental, por lo que además de imputar al arrestado su participación en tres atracos, se le imputó un delito de lesiones. Tras ser puesto a disposición judicial se decretó su inmediato ingreso en prisión.
