Este domingo toda la familia va a poder disfrutar de Yo soy ratón, en solitario.
Un pequeño ser revoltoso que explora los recovecos de nuestra memoria emocional, de nuestra infancia. Para las niñas y los niños es diversión y sorpresa, una inesperada ocasión para poder reivindicar y gritar consignas revolucionarias, y por qué no, también escatológicas. Un lugar en el que descubrir aquellas otras dimensiones de la MÚSICA más allá de la puramente lúdica: su poder para conmover, aunar y crear espacios de comprensión.
Para el público adulto es una oportunidad para dejarse llevar, de empatizar y crear lazos de complicidad con los y las peques. Un contexto propicio par mirase hacia dentro y replantearse costumbres heredadas susceptibles de mejora…
Actuación en solitario. Recomendado para todos los públicos. Acceso libre hasta completar aforo.