La salud de las personas en general es algo importante, independientemente de los factores o de la zona del cuerpo de la que se hable. Pero, zonas del cuerpo como la columna vertebral merecen una atención totalmente diferente.
Tener malestares, dolores crónicos o molestias extendidas en el tiempo en la columna puede influir negativamente en la vida diaria de las personas. Puede, por ejemplo, limitarla físicamente, ya que se disminuye la posibilidad de movilidad, con acciones como caminar, levantar objetos o que agacharse cada vez cueste más. Limita emocionalmente, porque el dolor crónico influye en el estado de ánimo y en la calidad del sueño. Y limita hasta productivamente, porque puede generar costes médicos, ausentismo laboral y si no se trata adecuadamente, puede convertirse incluso en un problema de incapacidad laboral.
Pero claro está que siempre se puede hacer algo. Y todo comienza por adquirir una dimensión del problema.
¿Qué se puede hacer?
Especialistas en columna vertebral
La columna vertebral es un campo en el que trabajan los traumatólogos. Pero dentro de la traumatología, se deben buscar siempre a los mejores especialistas columna vertebral que existan, ya que se trata de una zona en la que intervienen muchas variables y solo los médicos que se especialicen en la columna podrán atender de una manera adecuada.
Los malestares, por más cotidianos que se hayan vuelto y por más que las personas “hayan aprendido a vivir con ellos”, deben ser siempre revisados por un profesional para poder atender a tiempo sus efectos negativos, antes de que sea en agravante de patologías mucho mayores en complejidad.
Es necesario entonces acudir a especialistas que tengan buenas referencias, que cuenten con un equipo multidisciplinario y que puedan ofrecer muchas alternativas con y sin cirugía. Los malestares de columna vertebral solo pueden curarse por completo si se ha obtenido un diagnóstico preciso.
Sesiones de fisioterapia
La fisioterapia también es una gran ayuda para las personas que tienen problemas relacionados con los dolores de espalda y de columna vertebral. En estos casos, es conveniente antes acudir a un profesional de la traumatología de columna, puesto que si el malestar es más grave de lo que se pensaba, la fisioterapia no ayudará demasiado y más bien alargará el tiempo en el que el dolor se convierte en algo con peores consecuencias.
Pero, sin duda, puede ayudar la fisioterapia a fortalecer los grupos musculares que intervienen en la zona de la espalda y a mejorar la flexibilidad y movilidad, lo que puede ayudar en el plazo inmediato.
Cambios significativos en el estilo de vida
La forma en la que se trabaja actualmente, desde las personas que tienen trabajos muy pesados y deben usar constantemente su fuerza, hasta las que pasan más de 8 horas sentadas frente a un escritorio, tienen mucho que ver con los problemas de la salud en la columna vertebral.
Por eso, hacer cambios en el estilo de vida puede ayudar. Desde cuidar el peso saludable, realizar ejercicio regularmente, corregir la postura durante el día y hasta cuidar de las condiciones óptimas del descanso pueden ser suficientes para que los malestares desaparezcan, al menos en sus molestias más comunes.
Manejar las situaciones de estrés
La columna vertebral es el núcleo en el que se encuentra gran parte del sistema nervioso del cuerpo humano. Por eso, muchas veces las situaciones de estrés, de tensión, las preocupaciones y todo lo relacionado con la vorágine de la vida diaria terminan impactando directamente en ella.
Practicar técnicas de relajación, intentar silenciar esas cosas que hacen daño en el día a día, pero que no tienen una resolución clara por parte de las personas, o directamente hacer yoga o meditar puede ser de gran alivio para esos malestares de columna que tienen un origen en las tensiones que produce la rutina diaria.
Eso sí: nunca nada será tan determinante como ponerse en manos de especialistas y prevenir así complicaciones a largo plazo.