La rivalidad entre la empresa aeroespacial Blue Origin de Jeff Bezos y la de Elon Musk, SpaceX, es muy sonada. Hace unos años, la primera se quejó de que la NASA se decantase por la segunda para un proyecto, ya que cerraba las puertas a la competencia. Recientemente, la empresa del fundador de Amazon ha ganado una de las batallas de la agencia espacial estadounidense y será la encargada del lanzamiento de la misión Escape and Plasma Acceleration and Dynamics Explorers (ESCAPADE).
Según ha acordado la NASA, utilizarán el cohete reutilizable New Glenn de Blue Origin, que realizará su vuelo inaugural en 2023. La misión ESCAPADE está programada para lanzarse a finales de 2024 desde el Complejo de Lanzamiento Espacial-36 en la Estación Espacial de Cabo Cañaveral (Florida) y ayudará a la NASA a enviar instrumentos a Marte para seguir estudiando el planeta.
Con ESCAPADE, los científicos de la agencia estadounidense estudiarán la magnetosfera, que es la zona magnetizada del espacio que rodea Marte. El papel de Blue Origin será lanzar los dos satélites idénticos equipados con tecnología que permitirán la observación espacial de cómo el viento solar afecta a la magnetosfera o como la energía y el plasma salen de ella.
Las naves que la NASA mandará con el New Glenn tendrán tres instrumentos que permitirán llevar a cabo la misión:
- Un magnetómetro que medirá el campo magnético.
- Un analizador electrostático para medir iones y electrones.
- Una sonda Langmuir que calculará la densidad del plasma y el flujo ultravioleta extremo solar.
La NASA estima que los satélites de ESCAPADE tarden aproximadamente 11 meses en llegar a la órbita marciana desde la Tierra. Con los datos que proporcione, los investigadores podrán comprender mejor la meteorología espacial para futuras misiones tripuladas que se envíen al planeta vecino.
