Hacer aquello que nunca has hecho y celebrar una fiesta de cumpleaños por todo lo alto son buenas opciones para evitar caer en el abismo de los 40 años
Llega el 40 cumpleaños y con ellos una época de madurez formada en base a la experiencia vivida a lo largo de las cuatro décadas anteriores. Si bien es cierto que hay una creencia popular de que los 40 vienen acompañados de una crisis personal, la realidad es muy distinta o al menos, eso es lo que creemos que debería ser.
No por cumplir cuarenta caes en un abismo de melancolía y descontento personal sino que entras en una etapa más reflexiva y humana que no hace sino reafirmar tus creencias y dejar de lado aquello que hasta el momento no aporta nada en tu vida. Por eso creemos firmemente en que este nuevo cambio de década debe ser celebrado por todo lo alto, cumpliendo sueños que no has podido hacer antes y por supuesto, con una gran fiesta llena de amigos y familiares que demuestren su amor por vosotros.
Es el momento de valorar qué es lo importante en vuestra vida y elaborar una lista con todos aquellos objetivos que queráis cumplir. Independientemente de si eres padre o no, es necesario buscar el tiempo para alcanzar esas metas marcadas. Si se empieza con pequeños retos que poco a poco se van superando seguramente el premio final será grandioso. En este sentido pensad en realizar viajes a destinos que no hayas podido visitar anteriormente.
Es el momento de hacer el viaje de vuestra vida, ese con el que siempre has soñado. Pensad en un presupuesto y una fecha para hacerlo, pero que no pase más de un año, porque si no nunca lo haréis. A partir de aquí es muy sencillo, haced una búsqueda exhaustiva por Internet de los mejores precios de billetes y hoteles o id en busca del mejor paquete turístico. Debéis tener en cuenta si este viaje lo queréis hacer solos o acompañados porque si optáis por ir con alguien deberéis tener en cuenta sus opiniones, al menos en relación a su disponibilidad.
Otra manera para celebrar vuestra nueva etapa vital es inaugurarla por todo lo alto con una fiesta memorable en el lugar que más os guste ya sea en la playa, en la montaña, en un local o en vuestra discoteca favorita. Pensad en quiénes necesitáis que estén ahí ese día y hacedlos partícipes de vuestra alegría. Hacer la decoración de 40 años con todos aquellos adornos que demuestren que estáis de celebración, los globos, las velas, divertidos photocalls e incluso los disfraces son una gran opción decorativa, sin olvidar por supuesto la comida, la bebida y la tarta.
Si no os convencen estas ideas o incluso si queréis agrandar la celebración de vuestro 40 cumpleaños podéis optar por dedicar un día a vosotros mismos, en el que estéis solos pero haciendo algo que no habías hecho en mucho tiempo: mimaros. Una sesión de spa, maquillaje o leer un buen libro en un jardín o en la playa con una copa en la mano, puede ser una gran alternativa. En cambio si lo que buscáis son aventuras, hacer una escapada a la montaña en la que se pueda trepar una vía ferrada, hacer escalada o practicar barranquismo, puede ser una alternativa. Si por el contrario sois más de mar, podéis optar por el buceo, el snorkel o el kitesurf en un paraje marítimo rico en arrecifes y fauna marina.
Llegar a los 40 años no significa caer en el descontento total, y eso es lo que os hemos querido demostrar con estas propuestas. Al fin y al cabo si vuestra salud y la de los vuestros es buena y no hay nada grave que os empañe el día a día, ¿por qué optar por la tristeza de hacerse mayor? Qué mejor manera de demostrar que estamos vivos celebrando que crecemos y que aumentan nuestras experiencias, nuestra riqueza vital y la convicción de que quienes están a nuestro lado nos quieren de verdad. Lanzaos a celebrar y vivir aventuras porque hay algo que es innegable, el reloj sigue avanzando y llegar a la vejez con la sensación de haberte perdido algo por el camino será uno de los recuerdos más agridulces que os quedarán.
