El Ayuntamiento de Arroyomolinos ha recibido esta semana un escrito de la CHT (Confederación Hidrográfica del
Tajo, dependiente del Ministerio para la Transición Ecológica y Reto Demográfico del Gobierno de España) que echa por tierra el ambicioso proyecto en el que se había trabajado en los últimos meses con el fin de solventar lo antes posible la situación producida en las parcelas de las calles Álamo y Alameda afectadas por la crecida del arroyo de la Arroyada hace casi un año.
En este sentido, y a pesar de tratarse de la Administración más pequeña y con menos competencias, desde el Consistorio se trabaja a contrareloj y tan solo restaba la aprobación definitiva de la CHT, una aprobación que permitiría iniciar cuanto antes las obras de protección de los taludes en el arroyo de la Arroyada dando así respuesta a las demandas vecinales.
Sin embargo, tal y como ha explicado el concejal de Medio Ambiente de Arroyomolinos, Luis Quiroga, durante el Pleno del Ayuntamiento celebrado hoy jueves: “nuestra sorpresa ha sido que la ansiada aprobación de la CHT nos ha llegado solo de forma parcial, autorizando cinco de los ocho tramos que habíamos propuesto”.
“Esto es un terrible contratiempo puesto que, por un lado, nos retrasa enormemente el inicio de las obras ya que nos obliga a rehacer el proyecto; y, por otro, que no se acometan las obras en su totalidad puede conllevar que las casas situadas más abajo sufran las consecuencias”, ha afirmado Quiroga.
Asimismo, el edil ha señalado que “desde el minuto uno el Ayuntamiento ha estado al lado de los vecinos, realizando las gestiones y labores oportunas, y asumiendo responsabilidades mucho más allá de nuestras competencias para garantizar la seguridad y dar solución a esta situación”.
Por otro lado, Quiroga ha querido destacar “el importante desembolso económico que supone para las arcas del Consistorio, a pesar de no ser nuestra competencia” así como “la imposibilidad de actuar con la celeridad que nos gustaría puesto que la CHT ha demorado una y otra vez los plazos, solicitando más y más documentación, para ahora encontrarnos con esto que retrasa muchísimo el inicio de unas obras que por nuestra parte podríamos haber puesto ya en marcha hace meses”.
La situación actual es una consecuencia de los hechos ocurridos en noviembre de 2021, ya que las fuertes lluvias provocaron la crecida del arroyo de la Arroyada afectando a algunas de las parcelas colindantes, situadas en las calles Álamo y Alameda. Desde el primer momento el equipo de Gobierno del Ayuntamiento de Arroyomolinos, liderado por su alcaldesa Ana Millán, mantuvo reuniones con los vecinos trasladándoles su preocupación ante esta problemática y explicándoles de primera mano las medidas en las que se trabaja para atajar cuanto antes esta situación.
Entre otras iniciativas, se recordó que el Ayuntamiento lleva actuando en los últimos dos años en el mantenimiento y limpieza del cauce, dentro de sus competencias. Además, y tras las lluvias mencionadas, se mantuvieron diversas reuniones de urgencia con el fin de reclamar su implicación al resto de Administraciones competentes: Canal de Isabel II (Comunidad de Madrid) y Confederación de Hidrográfica del Tajo (Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico). Y es que el Consistorio está liderando la coordinación con dichas Administraciones para, entre todas las partes, atajar este problema.
Por otro lado, el pasado mes de marzo se presentaba ante la CHT el Documento Justificativo de Cálculos Hidrológicos e Hidráulicos en el Arroyo de la Arroyada, un trabajo técnico de gran precisión y complejidad que se llevó a cabo en tiempo récord. Ya en mayo, y tras los requerimientos de la CHT, el Ayuntamiento de Arroyomolinos presentó el Proyecto ‘Protección del Talud en el arroyo de la Arroyada a su paso por la trasera de las calles álamo y alameda en Arroyomolinos’, así como diversos estudios y documentación.
El pasado mes de agosto, la CHT enviaba una propuesta de aprobación condicionada a la que el Consistorio dio respuesta al día siguiente. Ya en septiembre, hace escasos días la CHT emitía un escrito en el cual otorgaba al Consistorio la autorización parcial (cinco de los 8 tramos) lo que supone rehacer el proyecto y dividirlo en dos fases, y retrasa los plazos licitación y comienzo de los trabajos.
El proyecto propuesto por el Arroyomolinos, define la solución técnica de las obras y trabajos a desarrollar, así como la cuantificación económica de los costes que se derivan de la ejecución material de las mismas. Asimismo, se añaden cálculos tanto hidrológicos e hidráulicos como de estabilidad; estudios geotécnicos, de topografía, de gestión de residuos y de seguridad y salud; así como diversos planos y documentación.
Así, la obra que acometerá el Consistorio se divide en dos tipos de actuaciones: en una primera fase, se procederá a la limpieza del cauce y la protección de la escollera, con el fin de evitar que progresen y pongan en peligro los taludes de las viviendas de la margen izquierda, y el sendero de
la margen derecha.
La segunda actuación consistirá en un tratamiento de estabilización de las partes superiores del talud, donde se encuentran las fincas que lindan con el cauce, mediante claveteado del suelo o soil nailing.
Con estas actuaciones, se pretende estabilizar y proteger, de manera definitiva, el talud del arroyo frente a agentes climáticos futuros evitando así su deterioro y los posibles peligros de deslizamiento en las parcelas
anexas.
