Cuando la base aérea se estableció en Getafe, la ciudad apenas contaba con una población superior a 5.000 habitantes, un siglo después, se ha convertido en uno de los motores económicos de la Comunidad de Madrid gracias en parte por el desarrollo de la industria aeronáutica, y se acerca a la cifra de 200.000 vecinos y vecinas.
En la base aérea de Getafe, Juan de la Cierva consiguió volar por primera vez el autogiro, el precursor de lo que más tarde se convertiría en el helicóptero y que unió el nombre de la ciudad para siempre en la historia de la aviación.
La alcaldesa de Getafe, Sara Hernández, ha recordado que “somos cuna de la Aviación Española gracias a la Base Aérea, lucimos orgullosos los aviones en nuestro escudo y hoy en día Getafe no puede entenderse sin nuestra vinculación directa con el mundo de la aeronáutica. Mucho de lo que somos y hemos conseguido está ligado inexorablemente con el 18 de marzo de 1920”.
“Desde nuestros abuelos hasta nuestras nietas, todos en Getafe hemos crecido disfrutando de los aviones surcar el cielo a pocos cientos de metros de nuestras viviendas. Incluso el urbanismo de Getafe ha estado condicionado siempre por el cono de vuelo de la Base Aérea, conformando una ciudad acogedora y cercana, con edificios sin demasiadas alturas” ha reiterado Hernández.
La alcaldesa ya ha comunicado al coronel de la Base Aérea esta propuesta de concesión, para la realización de un acto conmemorativo que se celebrará cuando sea posible.
