"Durante los días 2 y 3 de julio se acometieron las gestiones pertinentes para agilizar la destrucción de este residuo en condiciones seguras en aplicación de la Orden MAM/304/2002 del 8 de febrero de 2010", han indicado fuentes municipales.
Por eso, ahora el Gobierno local critica "la falta de celeridad mostrada por el Ejecutivo regional" a la hora de deshacerse de estos residuos, "que permanecían almacenados desde hace décadas a pesar de la existencia de una orden judicial de 1981".
Según han destacado, primero era "necesario" tomar muestras del contenido de los silos existentes en el almacén y de los envases del aceite para decidir el tratamiento de destrucción, de modo que el 2 de julio se les facilitó ya el acceso a la nave al personal contratado por la Comunidad de Madrid para que se las llevase.
Tras finalizar la recogida de elementos, y la elaboración de inventario por parte de la Administración autonómica, "sin ninguna incidencia", este local "fue clausurado y tapiado de nuevo por los servicios municipales".
A partir de ese momento, y tras los resultados que se obtengan de las muestras tomadas, tiene que ser la Consejería de Medio Ambiente de la Comunidad de Madrid "quien debe realizar el procedimiento de contratación para la retirada y destrucción del aceite de colza", han recalcado las mismas fuentes, por lo que piden que se acelere.
"Esperamos que a partir de ahora exista un compromiso firme por parte de las autoridades competentes para resolver este tipo de incidencias, sobre todo cuando se trata de un tema de salud pública y preservación del medio ambiente", han concluido.
