Este servicio está destinado a personas mayores de 65 años que no son plenamente autónomas, a las que se les ofrece estancia diurna en la Residencia de Mayores municipal en jornada completa de ocho horas, a elegir sábado o domingo.
Las familias pueden solicitar este servicio de manera puntual, si tienen un evento o necesidad en una jornada concreta, o de forma estable con una duración de seis meses prorrogable hasta cumplir el año.
“Queremos ofrecer a las familias con mayores a su cargo una posibilidad de descanso en su tiempo libre de fin de semana y apoyarles con todas las garantías de que están perfectamente atendidos y cuidados”, explica la concejala de Bienestar Social, Raquel López.
Las personas dependientes en grado 1 y 2, solo podrán optar al RESMA de manera puntual puesto que es la Comunidad de Madrid quién tiene la competencia y responsabilidad en la cobertura de este servicio.
Las personas que accedan al servicio tendrán que realizar en la Residencia de Mayores un test de antígenos para evitar contagios. La derivación a este programa se realiza a través de Servicios Sociales.
