Conducir con música

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Una conducta de las más comunes al conducir, es hacerlo escuchando música porque es algo que relaja y sirve para que, en un viaje largo, el conductor no se sienta solo y que el tiempo pase más rápido. Pero existen ciertos riesgos al conducir con música, porque puede suponer una fuente de distracción y especialmente cuando la escuchamos demasiado alta, como por ejemplo:

 
- Se fija la atención en la música, en cambiar de emisora o pasar de canción, en vez de fijar atención en el tráfico.
- No se es consciente de determinadas acciones como acelerar a tiempo o frenar.
- El conductor se desconecta de los estímulos externos que lo pueden ayudar a evitar un accidente, como por ejemplo, no escucha el claxon de un vehículo, con el consiguiente riesgo.
- Se dejan de prestar atención a señales de tráfico porque la música puede alterar los sentidos.

También influye la elección de la música. Se comenten más errores si escuchamos nuestros temas favoritos, más que cuando escuchamos música al azar. Puede parecerte exagerado pero realmente mucha gente se pone a cantar sus canciones favoritas y eso perjudica su conducción.

Según algunos estudios, el estilo de música puede influir en la conducción: escuchar rock puede ser peligroso, porque es música más agresiva o el jazz por ser una música más complicada.

Así que, sea cual sea tu preferencia musical, es recomendable que lo hagas a un volumen moderado que te permita oír lo que ocurre a tu alrededor, incluso es aconsejable música suave que relaje un poco, pero lo más importante es que no pierdas nunca la atención y que siempre procures conducir bien.

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