El comprador financiero HelpMyCash.com ha realizado un estudio comparando la evolución del mercado en los últimos meses y queriendo hacer una previsión que arroje algo de luz a lo que podría ser el escenario de hipotecas y préstamos de los bancos para el año que viene.
Según este estudio comparativo, se prevee que para el año que viene, la banca sea igual o incluso más exigente con sus préstamos hipotecarios que este año que cierra, básicamente porque, debido a la crisis económica producida por la pandemia COVID-19, muchos hogares han perdido poder adquisitivo, tienen problemas financieros o directamente están en situación delicada. Para ellos, este estudio augura que tendrán muchas más trabas a la hora de lograr el préstamo.
Del mismo modo, se plantea un escenario general en el que es probable que ninguna hipoteca consiga más allá del 80% de financiación, a menos que se trate de personas con alto poder adquisitivo o funcionarios.
Como cada año, en el primer trimestre se da una subida de los tipos de interés, y este año que entra no será diferente, puesto que el Euribor se va a mantener en valores negativos. Los bancos necesitarán recuperar las inversiones, y por ello subirán los tipos de interés, para compensar. Aun así, los préstamos en hipotecas variables seguirán siendo baratos en comparación a otros años.
Otra desventaja que se señala en este estudio es que, debido a la fusión de varios bancos el pasado ejercicio, la competencia y la oferta de bancos se ha reducido, en lo que entra en juego la llegada reciente de la banca online, que genera dudas sobre si será capaz o no de plantar ofertas fuertes contra competidores como los bancos tradicionales físicos.
Del mismo modo, se prevee que los bancos, en aras de conseguir un mayor rendimiento de sus préstamos hipotecarios, inflen otros precios o gastos de la hipoteca, o traten de que contrates otro tipo de servicios adicionales, como seguros anti accidentes.
El estudio también revela que a los bancos les interesará mantener activo el año que viene su mercado de subrogaciones, pues debido al cambio de la situación financiera e hipotecaria en el país, muchas hipotecas han quedado en desventaja, con condiciones peores que las que se están ofreciendo a nuevos préstamos. Con la subrogación, los bancos pueden hacerse cargo de las hipotecas de otros bancos a base de ofrecer mejores condiciones, lo que abarataría los costes para el usuario también.
