El mundo, en la actualidad ha progresado mucho, y los nuevos inventos y avances en tecnología han hecho que cada vez nuestras industrias sean más potentes y consigan mejores resultados con menos esfuerzo. Una de las industrias que más ha ayudado a la mejora de la calidad de vida de los seres humanos es la industria alimentaria.
La industria alimentaria es la que se encarga de convertir las materias primas que se extraen de la naturaleza (en su mayor medida, materias primas animales) en productos finales para el consumo de los seres humanos, tales como productos cárnicos, lácteos, avícolas o pescados y productos del mar, entre otros.
Características de la industria alimentaria
Como ya hemos mencionado con anterioridad, la industria alimentaria basa su proceso y su trabajo en convertir aquellas materias primas que provienen de la naturaleza, conseguidas por el hombre, en productos finales que puedan ser consumidos por los mismos.
La industria alimentaria utiliza materia prima de origen animal (carne de vacuno, carne de ave, pescados, mariscos y ganado ovino y porcino), pero también de origen vegetal y, en algunos casos, extraído de los hongos.
Gracias a la más avanzada tecnología en maquinaria industrial, consiguen que esas materias primas iniciales acaben siendo, tras un largo proceso que veremos más adelante, que acaben siendo los productos que podemos encontrar en nuestro supermercado más cercano o el mercado de confianza.
Otra característica importante sobre la industria alimentaria es que crece al mismo ritmo que lo hace la sociedad humana, se adapta a las nuevas necesidades y aplica las más avanzadas tecnologías que se vayan creando en cuanto a maquinaria de industria se refiere. Además, emplea gran cantidad de mano de obra humana, por lo que nunca serán las máquinas un sustituto efectivo para los seres humanos en este sector.
El exhaustivo control de calidad que se lleva a cabo en estas fábricas e industrias es de recalcar también, pues eso lo que permite que el producto final que se fabrica sea de alta calidad y apto para el consumo humano, sin ningún tipo de fallo. Es importante remarcar que estas industrias pasan por regulares controles para evitar contaminación innecesaria tanto de las materias primas como del bien final producido.
Objetivos principales
Uno de los objetivos principales y fundamentales de esta industria es que los seres humanos podamos seguir consumiendo los productos alimentarios que necesitamos para subsistir y sobrevivir en la sociedad y de la mejor calidad posible.
En adición, la industria alimentaria ha avanzado tanto en tecnología, que cada vez se busca más la mejor conservación del producto final para que aguante más tiempo y no tarde en perder sus propiedades, para que pueda ser ingerido y consumido por los seres humanos cuando sea necesario.
Además, durante el proceso de las fábricas alimentarias, se busca que el producto final conserve gran parte de los beneficios alimenticios que poseía la materia prima inicial, para que sea una gran fuente de nutrientes y valores nutritivos para el ser humano.
Con todo esto, y siendo la comida una de las necedades más básicas que nuestros cuerpos deben satisfacer, la industria alimentaria se ha convertido así en una de las industrias más rentables a nivel económico y en las cuales merece más la pena invertir tanto dinero para su mejora como para sus diferentes etapas de producción.
Principales procesos de la industria alimentaria
La producción de un nuevo bien de consumo alimentario comprende varias fases o procesos, que van desde que la fábrica recibe esa materia prima hasta que emite y reparte el bien final que recibe y consume el ser humano. Veremos a continuación de manera resumida en qué consiste cada etapa del proceso.
1. Recepción de la materia prima y su almacenamiento: Es la etapa más importante de todo el proceso a nivel de control de calidad. Se tiene que vigilar que la materia prima que llega (la carne, el pescado o la verdura, por ejemplo), estén en buen estado y sean de la calidad óptima para poder pasar a las siguientes fases. El almacenamiento se lleva a cabo según las características de cada producto, a nivel de temperatura ambiente, humedad y refrigeración.
2. Procesamiento de los alimentos: Cada alimento tiene sus características de procesado independientes de los demás, y es por eso que se necesitan industrias específicas para cada alimento, a nivel de cocción, troceado, tratamiento macerado, entre otros. No es lo mismo el filete de ternera que acabará como producto en sí que el que irá incluido en otro producto más complejo. Es por eso que algunas de estas industrias son un paso intermedio para luego ser enviadas a otras donde producirán el producto final de consumo.
3. Conservación del producto: Una vez el alimento ha sido procesado y creado el producto final, este debe ser conservado y almacenado de la manera más óptima para que mantenga todas las propiedades alimentarias y de calidad que se espera de él, antes de ser transportado hacia su punto de venta final. En este proceso se pueden aplicar diversas técnicas, como la pasteurización, deshidratación o esterilización, entre otras.
4. Venta al público y consumo final: Si bien es la última etapa del proceso, se convierte también en una de las que tiene vital importancia para la industria alimentaria, porque determinará su éxito y dejará en evidencia los fallos que el proceso pueda incluir que no hayan sido detectados durante el mismo. El consumidor final recibirá el producto y lo comprará dependiendo de sus necesites en el punto de venta que elija.
