El técnico fuenlabreño Óscar Quintana ha repasado las novedades de su equipo ante el partido del próximo domingo ante el equipo gallego del Río Breogán.
En primer lugar analizaba como estaba la plantilla tras la última derrota: "el grupo está entrenando con ganas, con ilusión y con lo justo de rabia para revertir la situación consiguiendo la victoria en el Fernando Martín ante nuestra afición y poder dedicársela a ellos. Lo que está bien es empezar a ganar e ir quitándote fantasmas, miedos y piedras de la mochila. Lo que hay que hacer es usar toda esa rabia que tenemos como energía positiva para conseguir la victoria el domingo, que es muy importante”.
Sobre la forma de poder conseguir la victoria Quintana indicaba que "debemos ser más sólidos, sobre todo mentalmente. En Manresa hubo momentos buenos de defensa, pero en los últimos segundos de algunas posesiones un corte, un balón que se escapa nos estropearon el buen trabajo defensivo anterior. Si empezamos a completar ese trabajo defensivo estaremos cerrando una vía de agua y nos permitirá correr. Tenemos que ser más regulares y más sólidos mentalmente”.
Las nuevas incorporaciones de Mehdy Ngouama, Osas Ehigiator, Ken Horton y Keanu Pinder puede dar una nueva energía al equipo: "En el caso de Osas ya está entrenando, obviamente aún falto de ritmo tras mucho tiempo sin poder jugar, pero nos puede ayudar por ejemplo en rebote que es uno de nuestros problemas básicos. Mehdy ya empieza a conocer la liga, en Manresa ya se vieron situaciones donde nos puede aportar tanto en defensa como en ataque. Horton aterrizó bien, es un jugador que conoce la liga, sabe los parámetros en los que se mueve y nos va a ayudar bastante. Y ahora esperamos también que el impacto sea muy positivo por parte de Keanu Pinder”.
Óscar Quintana también analizaba al equipo rival: “es un equipo duro, un equipo físico que juega a buen ritmo, un equipo que en todo momento quiere, un equipo profundo, en muy buena dinámica. Un equipo que está jugando un gran baloncesto, incluso mejor que la temporada pasada aunque no haya tenido tanta resonancia como el año pasado porque no tiene jugadores del nivel de Musa o Kalinoski. Es un equipo con letras mayúsculas”.
Para finalizar, el técnico fuenlabreño hacia referencia a la afición: "Yo sé que es difícil, lo dije nada más llegar, la rabia y la frustración de ellos también se nota. Creo que el equipo está con ganas de devolver a la afición el ánimo que le ha dado. La grada está deseando ver al equipo competir bien y estar en positivo. Si el equipo arranca como en Manresa y somos capaces de estar más minutos en ese nivel, la grada va a estar al cien por cien con el equipo como siempre lo ha estado”
