El Atleti reduce a una pachanga el mejor partido de la jornada

El Atlético de Madrid ganó al Sevilla 4-0 en su mejor partido de la temporada. Casualidad o no, coincidió con la vuelta al banquillo de Simeone. Koke abrió el marcador y Saúl hizo el segundo. Raúl Jiménez marcó su primer gol. El Sevilla estuvo irreconocible en el Calderón.

27/09/2014 | Sergio Martínez | Fn

El Atleti ha revertido todas las críticas que le hacíamos desde la prensa, y lo ha hecho a lo grande. Arropado por su afición y ante un rival de entidad, aunque ayer no lo pareció. El Sevilla tenía ante sí un partido para profundizar en su buena racha y valorar cuáles son sus posibilidades reales en esta liga. Si tenemos que guiarnos por lo que vimos en el campo, son muy pocas.

Simeone hizo dos cambios en el once en su vuelta al banquillo, tras su castigo por pasarse al lado oscuro. Metió a Ansaldi en lugar de Siqueira previendo que iba a necesitar más poderío defensivo, y sentó a Griezmann para poner a Saúl Ñíguez. La primera prueba de que el argentino está bendecido por los dioses del fútbol es que ambos estuvieron a un gran nivel. El lateral fue una roca que vivió más en el campo contrario que en el propio, y el canterano terminó marcando. De momento, dos aciertos para Simeone.

El tercero es que, a la vez que el entrenador volvió al banquillo, volvió el mejor Atleti. Las mejores cualidades del equipo aparecieron de nuevo, como si nunca se hubiesen ido. La presión asfixiante estaba ahí, la movilidad también, no tuvo que preocuparse demasiado de defender gracias a Gabi y ofensivamente le fue bien con sus dos goles a balón parado de rigor. Todo en orden por el Manzanares.

Koke abrió la cuenta con fortuna, con un disparo que desvió Nico Pareja y que Beto rozó con los dedos mientras se colaba en la red. Un bonito tanto producto de la fortuna, pero que recompensaba a un Atleti superior. El segundo gol fue una obra de ingeniería a balón parado, como no podia ser de otra manera. Una falta que dejó Arda hacia atrás para Miranda, que puso el centro al segundo palo, donde cabeceó a la red Saúl. La perfección hecha jugada.

El Sevilla era un muñeco sin reacción en manos del Atleti, aunque lo intentara al comienzo de la segunda parte. Nunca tuvo ocasiones de verdadero peligro, y sus delanteros se fueron del Calderón como si nunca hubieran estado, pues no existieron.

El Cholo siguió con su camino hacia la beatificación haciendo tres cambios que resultaron claves. Nadie sabe si tiene conexión directa con el dios del fútbol, pero lo parece. Dio entrada a Raúl García, Raúl Jiménez y Griezmann. Simeone había pedido paz y apoyo a la grada esta semana, y su parroquia le obedeció como los soldados de un regimiento obedecen a su general al mando. El ejército cholista no se rompe con facilidad, pese a que hubiera un conato de motín la semana pasada. El jefe manda, y los felices soldaditos obedecen.

Y más cuando se demuestra que el líder tiene razón en casi todo lo que hace. La entrada de Griezmann dio profundidad y varias ocasiones de gol; la de Raúl García, un gol de penalti; y la de Raúl Jiménez trajo su primer gol como rojiblanco y toneladas de esfuerzo, todo tras decirle Simeone que hoy iba a marcar. Las escrituras sagradas las escribe el Cholo.

Y así, con un pleno de aciertos y una victoria contundente sobre un rival directo, fue el regreso del entrenador pródigo y del mejor Atlético de Madrid. La varita que ilumina a los colchoneros sigue intacta y todavía se guarda muchos trucos. Esperaremos impacientes a los próximos capítulos de la historia.


FICHA TÉCNICAÁRBITRO: González GonzálezGOLES: 1-0 Koke, min.18; 2-0 Saúl, min.41; 3-0 Raúl García p., min.82; 4-0 Raúl Jiménez, min.88ONCE DEL ATLÉTICO DE MADRID: Moyá, Juanfran, Miranda, Godín, Ansaldi, Tiago, Gabi (R.García 46'), Koke, Saúl (Griezmann 65'), Arda, Mandzukic (R.Jiménez 73')ONCE DEL SEVILLA: Beto, Figueiras, Pareja, Carriço, Kolo (Banega 46'), Trémoulinas, Krychowiak, Mbia, Aleix Vidal (Deulofeu 77'), Vitolo (Denis Suárez 46'), Bacca

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