Se trata del decano de los maratones españoles, que comenzó su andadura en 1978 y desde entonces se ha posicionado como un referente tanto a nivel nacional como internacional, hasta situarse como la punta de lanza del Rock ‘n’ Roll Running Series en Europa, el mayor circuito de running a nivel mundial.
El Gobierno regional aporta 180.000 euros en la edición de este año, que contará con alrededor de 40.000 participantes, entre ellos cerca de 10.000 corredores extranjeros procedentes de 110 países. Además de atraer visitantes de todo el mundo, constituye un escaparate único para mostrar al mundo la belleza de la capital, ya que su eje turístico volverá a formar parte de los ya emblemáticos 42,195 kilómetros.
Con tres distancias –Maratón, Media y 10K–, sus recorridos pasarán por pleno centro de la ciudad, incluyendo calles, plazas y monumentos como la Real Casade Correos –sede del Ejecutivo autonómico–, Gran Vía, Callao, Preciados, Puerta del Sol, Plaza de España y Palacio Real. También se podrán apreciar las Cuatro Torres, Plaza de Castilla, Santiago Bernabéu, Plaza de la Villa, Museo Nacional Centro de Arte Reina Sofía, Atocha, Neptuno, Museo Nacional del Prado, Cibeles o Catedral de la Almudena, entre otros lugares simbólicos.
Además, durante la carrera, los corredores y aficionados volverán a congregarse en diferentes núcleos de animación creando un ambiente inigualable por toda la ciudad, ya que el circuito se caracteriza por integrar a diversas bandas de música rock que amenizan el recorrido.
Como novedad este año, y por primera vez en el ámbito internacional, la organización certificará oficialmente la huella de carbono generada por el evento de acuerdo con el estándar internacional. Para ello incorpora nuevas medidas en favor de la sostenibilidad de la prueba.