Editorial
Era "vox populi" y comentarios generalizados de una gran mayoría de ciudadanos en los últimos días, tras descubrirse las andanzas realizadas de presunto tráfico de influencias del "pequeño Nicolas".
Si un chico de 20 años ha podido presuntamente engañar y estafar a políticos y empresarios, simplemente utilizando su capacidad de hacerse pasar por conocido o amigo de altos cargos políticos, mostrando fotos en los que aparece junto a ellos, que no podrían hacer los políticos con cargos de responsabilidad y con capacidad de tomar decisiones y adjudicar contratos públicos.
No ha habido que esperar mucho tiempo para que se destape esta realidad, hoy nos desayunamos con la trama en la que ha sido detenido el ex secretario general del PP Madrid Francisco Granados junto a otras 50 personas.
Esta trama firmó sólo en los dos últimos años adjudicaciones públicas por valor de 250 millones de euros a cambio de comisiones ilegales. Estas actividades se desarrollaban al menos en ayuntamientos y comunidades autónomas de Madrid, Valencia, León y Murcia, según ha informado la Fiscalía por medio de un comunicado.
Esta operación está dirigida por el Juzgado Central de Instrucción número 6 de la Audiencia Nacional, que dirige el magistrado Eloy Velasco, y la Fiscalía Especial contra la Corrupción y el Crimen Organizado. Las detenciones y los numerosos registros los está realizando la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil.
Por todo ello y pese a la conmoción que nos produce a todos el descubrir este "secreto a voces" de una trama que se le imputa los delitos de Blanqueo de Capitales, Falsificación de Documentos, Delitos Fiscales, Cohecho, Tráfico de Influencias, Malversación de Caudales, Prevaricación , Revelación de Secretos, Negociaciones prohibidas a funcionarios, Fraudes contra la Administración y Organización Criminal, debemos felicitar a la Fiscalía anticorrupción y la UCO de la Guardía Civil, por detener y poner frente a la Justicia a tanto "chorizo" que utilizando su cargo y responsabilidad política, presuntamente han robado y cobrado comisiones ilegales.
Y aquí, no se salva nadie, llevamos ya muchos dias viendo como se van destapando "corruptos" en todas las formaciones políticas, sindicales y empresariales.
Lo importante ahora es ponerlos a disposición de la Justicia, que devuelvan lo "presuntamente robado" y que se impongan las penas correspondientes que deberían ser "ejemplarizantes" para que el resto de políticos y cargos públicos, se lo piensen antes de delinquir.
Todos los políticos no son iguales, es cierto, y no se debe generalizar, pero también es cierto que cada dia descubrimos que hay muchos implicados y eso nos indigna.
La solución no pasa, como piensan algunos, en votar a formaciones nuevas como Podemos o Ganemos, que defienden postulados "populistas" y "fracasados y anticuados" por muy indignados que nos sintamos.
La regeneración democrática, ya absolutamente imprescindible en nuestro pais, pasa por cambiar la Ley Electoral, pasa por que los políticos representen a los ciudadanos que los votan y no a su partido. Es decir debemos empezar la regeneración por los cimientos y no por el tejado.
