Pedro Sánchez denuncia que la figura de Mariano Rajoy está "asediada por la corrupción", mientras que Susana Díaz señala que la gente ya "no cree en los políticos".
Las reacciones ante la monumental Operación Púnica no se han hecho esperar de cara a la Oposición, que hoy se ha deshecho en censuras y críticas hacia el Presidente del Gobierno. Pedro Sánchez ha asegurado que éste está "asediado por la corrupción", y que debería ser "implacable y contundente, porque no basta con pedir perdón". Se refería así a las anteriores disculpas de Mariano Rajoy a los españoles por "haber situado en puestos de los que no eran dignos a quienes en apariencia han abusado de ellos".
Durante el debate sobre el Consejo Europeo celebrado en el Congreso, Pedro Sánchez le ha afeado también que "lo suyo no es el caso de una única y exclusiva manzana podrida" y que "la corrupción es veneno para la democracia". El secretario general del PSOE, partido al que la Operación Púnica también salpicó con las detenciones de militantes tales como el alcalde de Parla y el exalcalde de Cartagena, ha acabado proclamando: "Por eso, yo no voy a caer en el 'y tú más'. Yo digo 'y yo más', yo más contundente, yo más implacable y yo más ejemplar cuando existan casos de corrupción en el Partido Socialista".
Este mismo miércoles la presidenta de la Junta de Andalucía, la también socialista Susana Díaz, señalaba que a la vista de los continuos escándalos de corrupción "la gente ya no cree en la palabra de los políticos", y mantenía que "ya no basta con pedir perdón o hablar de pactos, porque eso suena a querer escurrir el bulto de nuestras propias personalidades"
