El pasado 18 de marzo de 2018 el senegalés Mame Mbaye murió de una parada cardiorrespiratoria mientras andaba por el barrio madrileño de Lavapiés y no por la persecución policial que se producía cuando diferentes personas huían para no ser identificados. De esta manera lo ha confirmado la Audiencia Provincial de Madrid.
Europa Press ha tenido acceso a la sententencia que lo ratifica, en la que la Sección Cuarta corrobora el registro de la investigación judicial que se abrió para decretar el origen del fallecimiento a raíz de una denuncia de S.O.S. Racismo Madrid.
Los hechos sucedieron el 15 de marzo de 2018 cuando un ciudadano de nacionalidad senegalesa sufrió un desvanecimiento y una parada cardiorrespiratoria tras haber corrido por la vía pública para alejarse del lugar en el que se encontraban determinados funcionarios policiales con la finalidad de evitar ser identificado por estos últimos.
Ahora, los magistrados de la Audiencia madrileña mantienen el sobreseimiento provisional y archivo de las actuaciones acordado por el Juzgado de Instrucción número 48 de Madrid.
Por su parte, la acusación popular mostró su disconformidad con el archivo ya que entendía que "el fallecido pudo haberse encontrado en una situación de hostigamiento y persecución policial" o pudo haber recibido "una inadecuada atención médica".