La Policía Nacional ha puesto fin al secuestro de un ciudadano argentino tras recibir la denuncia de un familiar a través del consulado en España. En dicha denuncia, cuenta que los secuestradores se habían puesto en contacto con la familia desde España para pedir un rescate de dos millones de euros. Pudieron hablar incluso con el secuestrado, que fue amenazado de muerte si no recibían el dinero.
Tras las investigaciones pertinentes, la Policía Nacional localizó en el barrio de Prosperidad el lugar donde estaba retenido el secuestrado, y consiguieron detener a los secuestradores cuando salían de la vivienda junto a la víctima. Cuatro de ellos tenían conocimientos del manejo de armas y de operaciones militares. La mayoría eran de nacionalidad francesa y uno de ellos era ruso.