El Comité Federal del PSOE ha aprobado, en la votación realizada a mediodía de hoy, optar por la abstención de sus diputados en el Congreso y sin condiciones, en la próxima sesión de investidura a la que se presentará Mariano Rajoy. El resultado de la votación ha sido de 139 a favor de la abstención, frente a 96 que han seguido defiendo el NO, aunque esa decisión suponga ir a unas terceras elecciones.
La resolución aprobada por el Comité Federal obliga inicialmente a todo el grupo parlamentario socialista a cumplirla, tal y como ha explicado Elena Valenciano, encargada de defender la propuesta de abstención: "La resolución es clara. Cuando el PSOE toma una decisión es de todo el grupo parlamentario y el texto habla del grupo parlamentario", afirmó ante los periodistas.
El PSC sigue con la intención de no acatar la decisión del Comité Federal
El cambio de posición del Comité Federal, pasando del NO inicial a la abstención, abre una crisis entre el PSC y el PSOE, amenanzando con romper la relación del partido catalán con los socialistas.
"Tenemos un problema con el PSC y si volvemos a mirar hacia otro lado con ese problema, nunca quedará resuelto", han dicho fuentes de la dirección del PSOE. El actual presidente de la Gestora ha reconocido que su primer objetivo es "convencer a los dirigentes del PSC para que eviten la consulta entre los afiliados al partido en Cataluña".
Miquel Iceta, primer secretario del PSC, ha recordado que "el problema para el PSOE no es el PSC, es Rajoy". Así, ha pedido comprensión a los dirigentes que consideran que una ruptura de la disciplina de voto por parte de los diputados catalanes hará "replantearse" las relaciones entre ambas organizaciones. "La cuestión es si el socialismo español es capaz de reconocer que hay un elemento diferencial crucial en este tema -en referencia a la investidura de Rajoy- cuando se aborda desde Cataluña", ha afirmado Iceta.
El Comité Federal de este domingo ha vuelto a crear una gran expectación, con más de 400 periodistas acreditados. Dió comienzo sobre las 10 de la mañana y ha estado presidido por José Blanco, Carmen Madrid y Mariola López.
Tras la intervenciones de Elena Valenciano defendiendo la abstención y el vasco Txarli Prieto que planteaba seguir manteniendo el NO y el rechazo a un gobierno del PP, ha comenzado el debate con la participación de 54 intervenciones, mayoritariamente de partidarios de seguir en el NO.
De los presidentes autonómicos que se han decantado por la abstención, solo han intervenido Susana Díaz y Guillermo Fernández Vara. Fuentes próximas a los líderes regionales han explicado que han preferido no intervenir dada la "pluralidad" dentro de las federaciones que presiden y que otros dirigentes, como Ciprià Císcar en el caso valenciano o Víctor Morlán, en el aragonés, han transmitido la postura de las direcciones regionales.
La presidenta andaluza, Susana Diaz, ha evitado pronunciar la palabra abstención y ha apelado a la unidad de los socialistas. "Necesitamos victoria y unidad", ha expresado Díaz, que también ha deseado que en los próximos comités federales puedan celebrar triunfos electorales. El presidente extremeño ha admitido que tiene "dudas" sobre la abstención, pero ha considerado que es la mejor opción para el futuro.
Dirigentes como Eduardo Madina, Soraya Rodríguez o José María Barreda han defendido también ese posicionamiento. "No soy un hereje", ha expresado Madina, que ha defendido que los socialistas no pueden ser "dueños del bloqueo del sistema". "He pasado la mayor parte de mi vida en dictadura y perseguido, que nadie me acuse de no ser de izquierdas", ha expresado el alcalde de Vigo, Abel Caballero. "No queremos entregar el gobierno a Rajoy para beneficiar al PP sino para evitar un mal mayor", afirmó el expresidente de Castilla-La Mancha.
Finalmente, como se esperaba, han ganado los defensores de la abstención como "mal menor", para propiciar un desbloqueo de la situación política e institucional de España.
